Piratería señales de cable en RD

Imágenes cortesía Google

La acción de la piratería de señales por parte de cableoperadoras sigue siendo un terrible dolor de cabeza para los distribuidores de señales y networks en toda Latinoamérica y el Caribe, incluida República Dominicana. No importa que los proveedores de señales tengan planes accesibles, con moderados paquetes de canales y a tarifas “acomodadas”, cableras violadoras de las normas se las ingenian para retransmitir ilegalmente esos canales e incluso, sus señales más premium.

Existen una serie de canales internacionales de notable calidad cuyos empleos de señales son libres de costos, ya que lo deseado es proyección en todos los territorios (NHK World TV, Al Jazeera TV, RT, Arirang, VTV Venezuela, etc.). Lo único que desean a cambio es saber el nombre de las cableras que reproducen sus señales y una cantidad aproximada de usuarios que ven sus canales (para fines de registros). No obstante, muchas cableras utilizan estos canales sólo como una manera de ampliar su abanico de ofertas en los denominados paquetes básicos, destinando las señales menos básicas y premium que utilizan ilegalmente para conformar los atractivos paquetes que cobran a los usuarios.

Como en otros países del área, en República Dominicana hay una enorme cultura de cableoperadoras regionales y municipales dedicadas a ofertar a sus usuarios variedades de canales por los que no pagan derechos. Si bien existe un pastel de suscriptores que llega a casi los 800 mil usuarios repartidos entre las cableras legales establecidas (según estadísticas de INDOTEL, órgano regulador estatal), la cantidad de clientes de estas cableras informales superan esa cantidad.

Competencia desleal entre cableras

Los barrios del Gran Santo Domingo, localidades marginadas y pueblos del interior, tienen diversas opciones de pequeñas empresas de cable que ofertan servicios a precios populares, con canales básicos y premiums cuyas tarifas son insostenibles para las cableoperadores legalmente establecidas. Incluso, el atrevimiento es tal, que también ofrecen señales de canales premium que sólo pueden ser comercializados y distribuidos dentro de Estados Unidos (Starz, Encore, TNT premium y más). Ni siquiera las principales cableras de República Dominicana pueden darse el lujo de tener entre sus ofertas e estos estelares networks.

La competencia es tan desleal, que algunas principales cableras establecidas se han visto en la necesidad de ofertar sin mucho ruido algunos de esos canales a sus usuarios, realidad que no figura en los establecidos reportes de suscriptores que mensualmente tienen que enviar a los distribuidores para fines de pagos por utilizar las señales contratadas. Eso así, porque ante la vista de los usuarios, no es el mismo contenido atractivo entre los canales autorizados a ser distribuidos y los canales de contenido premium solamente disponibles para suelo norteamericano.

Otra desventaja claramente visible, es que las garantías que respaldan a las principales cableras no están al alcance de los operadores ilegales. Los usuarios de las cableras ilegales están expuestos a las constantes interrupciones de sus canales, ya que su proveedor de servicios proporciona sus canales de manera fraudulenta y por lo tanto no hay respaldo técnico que garantice continuidad y calidad en la señal. Por lo regular estos usuarios son un tanto conformes a estas irregularidades y aprenden a convivir con ellas, ya que están conscientes de reciben estelares señales por poco (aunque no se visualicen bien).

Acciones de distribuidores contra la piratería

Con el tiempo, los principales networks han abierto más ofertas de canales para territorios internacionales, cuyo contenido está casi a la par de la programación doméstica consumida en Estados Unidos o con un contenido más enfocado a lo original de esos países, pero la primera opción de lo producido en Norteamérica será siempre de ese país.

Ante la falta de un constante y real apoyo del INDOTEL, empresas como Fox, HBO, Viacom, Turner y otras, han tenido que hacer acciones individuales para frenar en alguna medida la explotación ilegal y no remunerada de sus señales. No obstante, estas acciones son como un parche al problema, ya que es muy difícil tener una constante presencia y acciones en todo el territorio nacional las 24 horas del día, los siete días de la semana, los 365 días del año.

Cuando se llevan a cabo las acciones de los networks, distribuidores o representantes, las cableras intimadas, advertidas o multadas se limitan a sacar esas señales de manera temporal, pero eventualmente vuelven a insertarlas en sus parrillas de ofertas. Para eso, esas empresas necesitarían tener oficinas establecidas en República Dominicana, con personal y plan de acciones para esos fines. El costo monetario que esto implica es alto (sin contar lo que ya pagan por concepto de monitoreos y gestiones afines), lo que sumado a los costos elementales para producir, vender y distribuir dispara aún más sus presupuestos (es menos costosos hacer visitas sorpresas y hacer acciones eventuales en casos concretos y documentales de las infracciones).

Países con carteras más amplias de suscriptores como Colombia, Panamá, Venezuela y México, igual libran con este mal de la piratería de señales, aunque en el caso de ellos se agudiza aún más con la comercialización de dispositivos para bajadas de señales no autorizados. En lugares como los indicados, hay acciones más concretas contra los piratas de señales, donde se cuenta con el respaldo estatal a través de los órganos reguladores, con operaciones y sentencias ejemplificadoras.

Una acción reciente fue llevada a cabo por Fox Networks Group (FNG) Latin America, la que mediante una querella criminal, contó con un amplio respaldo de las autoridades para hacer un operativo conjunto y simultáneo en Argentina, Chile y Ecuador, entre otros países. Destacada como una de las acciones más importantes de la historia latinoamericana en relación a la protección de la propiedad intelectual, a inicios de junio de 2018 se desbarató una asociación ilícita internacional que pirateaba contenidos de distintos operadores y programadores de televisión. Ellos distribuían ilegalmente vía internet a más de 50 mil cuentas de usuarios repartidos en los países indicados (fuente The Daily Television). FNG fue el abanderado de la acción, siendo coherente con su siempre activa gestión regional contra la piratería de señales.

Piratería afecta doblemente a Networks

La mayoría de las cableoperadores que comercializan con señales ilegales en República Dominicana trabajan aún con formato análogo y en varios casos, con plataformas mixtas que ya han iniciado procesos de digitalización con miras a ir acostumbrando a sus usuarios y ante un inminente apagón analógico anunciado en RD para el 2021 (según lo anunciado por INDOTEL).

Toda esta pérdida monetaria por parte de las comercializaciones ilegales afectan doblemente a los networks, programadoras internacionales o distribuidoras, ya que esta legión de suscriptores no declarados por parte de las cableras ilegales, reduce aún más el abanico de usuarios del cable, contra la cada vez más creciente demanda del contenido streaming. Las empresas que limitan su rango de acciones sólo para contenido streaming o en línea, no tienen que lidiar con cableras o piratería tradicional, ya que tienen contacto directo con el cliente/usuario. Las únicas intermediarias naturales son telefónicas, ya que mediante sus líneas contratadas es que se distribuyen y comercializan las opciones streaming (Netflix, Amazon Prime Video, Hulu, Apple, etc.).

Networks y acciones streaming

Los principales Networks ya han iniciado operaciones tendientes a ir preparando ese terreno streaming, comenzando con sus plataformas de TV Everywhere, donde sus usuarios ya se han estado acostumbrando a ver sus contenidos contratados desde cualquier dispositivo, en cualquier momento y en cualquier lugar. El siguiente paso fue vincular esas opciones a sus servicios premium y las acciones siguientes - y en franco desarrollo - es la de producir contenido exclusivo visible sólo mediante sus Apps (en esta etapa aún disponibles a través de los canales premium del cable).

Ejemplos de lo indicado previamente ya se han puesto en práctica por Amazon, Apple y HBO, las que han destinado millonarios presupuestos para comprar propiedades intelectuales, contratar talentos y para producir contenidos exclusivos que habrán de competir muy estrechamente con las plataformas streaming actualmente en competencia (incluyendo a DC, Disney y Fox, que lanzaran sus nuevas opciones premium entre éste y el próximo año).

Mientras se produzca todo lo referente al apagón analógico en República Dominicana, así como que crezcan y fidelicen los consumidores streaming, los networks tienen que ganarse a esos suscriptores no declarados por las cableras ilegales. De no ser así, estos usuarios irregulares bien podrían dar un salto en sus costumbres y engancharse al universo streaming, en vez de seguir con lo que conocen como canales de cable como tal. Cuando los networks tengan sus respectivas plataformas streaming exclusivas disponibles para estos usuarios, es posible que ya estos sean clientes asiduos de los hasta ahora disponibles servicios online. Puede que ya sea tarde para conquistarlos. FM